La radio cristiana no se trata solo de transmitir información: se trata de construir una comunidad de creyentes que se apoyen mutuamente en su caminar de fe. Fomenta la participación activa de tus oyentes al alentarlos a enviar sus testimonios, compartir sus oraciones, aprender más y conectarse entre sí.
Un buena idea puede ser organizar eventos comunitarios como: encuentros de talleres o conferencias donde tus oyentes puedan interactuar cara a cara y fortalecer sus lazos espirituales.